miércoles, 10 de octubre de 2007

aguas de Maro, milagrosas

Aunque, primero hay que llegar ...



más de lo mismo





la punta del este, Maro





De estos sures inmensos, agradecidos, viejos, con más historias que los dioses puedan imaginar, el legislador no se pudo despedir mejor de su arbitrario rayado del mapa español:

nos dejó Maro en malagueño. Gracias.